i. Alineación
Es el proceso que ajusta las llantas de un vehículo para que miren hacia el frente, es decir, las llantas de su auto deben quedar paralelas entre sí y perpendiculares al camino.
Es recomendable realizar este servicio cada 10 mil kilómetros o cuando se realice algún ajuste en la suspensión.
ii. Balanceo
Es el proceso mediante el que se equilibra el peso de las llantas y de los rines. Si bien a primera vista todos los neumáticos lucen iguales, existen pequeñas diferencias en el peso de cada lado de la llanta. Durante el balanceo se equilibran estas imperfecciones mediante pequeños contrapesos que se colocan en el rin.
Cuando se realice la alineación es conveniente revisar nuevamente el balanceo de las llantas.